Cuando una zorra gime así sabes que está disfrutando
La sorprendió con una polla bastante grande, a veces las apariencias engañan. Al vérsela la chica empezó a comérsela, desde luego eso le gustaba, poder sentirla en su boca. Tras una mamada bastante larga se puso encima del chico y fue cuando la penetró. Ella no podía parar de gemir, se notaba de sobra que estaba disfrutando mucho de como se la follaba. Hasta el punto de que sus gritos mientras se la metía eran incluso exagerados, menuda zorra.
Esa es una de las formas de saber que te estás follando bien a una chica, escuchar como disfruta mientras le estás dando duro. Al final se corrió en su boca y en su pecho, a la guarra desde luego le gustó y mucho.