La obesidad no impide que pueda follar con su hermano
Creemos que la belleza responde a medidas. No tiene que ver con matemáticas, es biología pura aunque los medios de comunicación intenten hacernos creer lo contrario. Un ejemplo muy claro, es esta chica, que la obesidad no le impide follar con su hermano. Sobre todo porque ella misma siempre toma la iniciativa para hacerle una mamada de polla, luego que él la tiene dura, entonces no tiene otra opción que penetrar su coño y hacerla gozar. Eso todas las mañanas cuando están solos y también todas las noches, antes de dormir. Son muy cachondos realmente.