La tetona se despertó con ganas de sexo
Ambos estaban dormidos, pero la primera en despertarse fue ella. Encendió la luz de la mesilla y para ello restregó sus enormes tetas por la cara de su pareja. Estaba claro que no quería levantarse, pero tampoco quería seguir durmiendo. Despertó a su chico y pronto le hizo ver de que tenía ganas. Al tío le costó un poco despertarse, pero cuando una madurita tetona como ella te está comiendo la polla la cosa se anima rápidamente. Hasta le hizo una paja cubana, su polla se puso dura como el cemento, y poco después ya se la estaba follando como ella quería. Allí estaban los dos desnudos follando, y a ella le botaban sus tetazas de forma descomunal mientras mostraba su cuerpo desnudo y saltaba sobre su polla.
Al final se corrió mientras la zorra le hacía de nuevo otra paja cubana dejando sus grandes tetas llenas con todo su semen.