Métemela hasta el fondo y córrete dentro hermanito
Nunca pensó que pudiera follarse a su hermana, pero lo cierto es que tampoco podía imaginarse lo guarra que era la chica. Ella era camarera y había tenido sexo con muchos clientes, eso lo sabían todos. Pero al fin y al cabo él era su hermano, una especie de amigo confesor que nunca podría tener aspiraciones a algo más, y menos aun teniendo en cuenta que son familia. Sin embargo ese día la pilló un poco con el pié cambiado y decidieron ir a hablar de algunos problemas que a la chica atormentaban. Como siempre era tema de tíos, es decir, de pollas.
Tras un rato hablando con su hermana y, supuestamente con la intención de subirle la autoestima, le dijo que se desnudara para ver su cuerpo. Joder, que buena estaba la zorra. Habría que estar loco para no querer follar con ella.
La chica no era tonta, sabía perfectamente lo que quería su hermano y se lo iba a dar. Por eso en cuanto se sacó la polla ella fue como una gatita hasta ella para lamerla. Pero lo mejor fue cuando iba a penetrarla. Ella misma fue la que agarró el rabo para metérselo, lo quería dentro, y quería que se vaciara en su interior. Con ese poder de persuasión era obvio que lo conseguiría, así que en efecto, su hermano se la folló y también le dedicó una buena corrida interna para su disfrute.
