No hay nadie más y él tiene que follar a su hermanita
Su tribu cada vez es más pequeña y eso, junto con la constante amenaza de los tigres que se quieren comer a todos los hombres, complica en gran medida su vida. A esta edad, él debería estar casado, pero no tiene la dote para lograrlo y además, se tiene que quedar en casa cuidando a su hermanita. Ahora mismo, ella tiene ganas de follar y no hay nadie más que quiera o pueda hacerlo. Entonces tiene que sacar su polla para que ella haga que este dura y luego penetrar su coño. Es triste pero un hombre tiene que hacer lo que tiene que hacer. Es la vida de un varón.