Papá, se que hacer para que no estés triste
Su madre se había ido con otro hombre dejándolos a los dos solos, pero su padre todavía no la había olvidado. La echaba de menos y a veces se desahogaba bebiendo mientras miraba una de sus fotos, la depresión podía con él. Era una escena triste para cualquier hija, verlo así la entristecía y solo podía pensar en animarle de alguna forma. Finalmente una chica de 19 años tiene sus propios recursos, y lo cierto es que el parecido con su madre era asombroso. Por eso cuando comenzó a tocar a su padre diciéndole que ella podía animarle pronto entendió lo que quería decir. Se abalanzó sobre ella como si su esposa se tratase, besándola, tocándola… y por supuesto desnudándola. De hecho la dejó totalmente desnuda para así poder comerse todo su cuerpo, aunque empezó por su coño.
Después él también se quitó toda la ropa y comenzó a follársela, llevaba tanto tiempo sin meterla en caliente que hacerlo con su hija fue algo realmente excitante para él. Eso si, en todo momento pensaba que se trataba de la madre de la chica, al menos hasta que se corrió. Nada más correrse comenzaron los arrepentimientos al darse cuenta de lo que acababa de hacer, tal vez animado por el alcohol.