Se que he sido mala y me lo merezco
Claro que había sido mala, pero lo que más le gustaba a la zorrita era precisamente el castigo que iba a darle. La ató en una de las literas de la habitación con la intención de desnudarla. En cuanto vio su culo ni se lo pensó, agarró su verga y la penetró hasta el fondo. Un poco más tarde la desató, no hacía falta atarla, ella lo deseaba tanto como él. De hecho fue la zorra la que acabó saltando sobre su verga, aunque al final acabó tumbada mientras se la follaba y gemía como una perra.