Su propio hermano la tortura antes de follarla
Un día se da cuenta que las cosas comunes, no son para ella. Al usar cualquier cosa que encontraba en la casa, sin importar el tamaño, entendió que eso del dolor, le predecía placer. Entonces tenía que hacer algo al respecto y lo más lógico, es buscar a la persona con quien tiene más confianza. Que no podía ser otra que alguien de su propia familia: su propio hermano. Ahora este siempre la tortura hasta hacer que su piel este morada de tantos golpes y luego que ella está bien excitada, entonces el chico empieza a follarla. Se la mete en la boca, el coño y también se la mete por el culo. Eso, sin hacer caso a sus expresiones de dolor porque eso es lo que a ella le gusta.