Te vas a correr sin penetrarme, lo tienes prohibido
Cuando es tu cumpleaños y tu esposa te regala una puta como esta no esperas que sea así del todo. La primera norma es que nada de penetración. Es decir, podía hacer todo lo que quisiera siempre que su polla no entrase dentro de su coño o de su culo. Pero como lo demás valía todo empezó a comerle la polla y luego a jugar con él. Por el simple hecho de estar prohibido el juego era un poco más peligroso, ella lo pajeaba justo rozando su coño. Ambos sabían que su polla no podía acabar dentro, pero tal vez un roce con sus fluidos vaginales le harían darse cuenta de lo que se estaba perdiendo. Al final ambos siguieron las reglas y él se corrió sin penetrarla.